Jueves 19 de Enero de 2012

Vicent Macián Quartet
"Bam!"
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Carlos Llidó Septet
"Camino San Juan"

Como un estallido, aquí está el primer disco a nombre de Vicent Macián, que llega cuando este saxofonista ya tiene una voz plenamente consolidada en el panorama musical español. Macián nació y se inició en el jazz en Sedaví (Valencia), esa prodigiosa cantera pacientemente alimentada por las iniciativas de Francisco Blanco Latino. Durante los últimos años ha participado en los diversos grupos liderados por Blanco desde Sedajazz, además de tocar en directo o en grabaciones al lado de Ramón Cardo, Perico Sambeat, Albert Sanz, Amadeo Adell, Toni Belenguer, Miquel Casany, Alberto Sánchez, Abe Rábade, Marc Miralta, Paco Charlín, E.J. Stirckland y Avishai Cohen entre otros. En su formación han jugado un papel importante Mark Turner y Chris Cheek, dos de los saxofonistas más influyentes de la escena neoyorkina de las últimas décadas. En la actualidad es profesor del Taller de Músics de Barcelona.
Junto a Macián hay en este compacto tres músicos importantes de la escena valenciana. Vicente Espí, el más veterano, atraviesa un momento magnífico de forma y recientemente ha visto reconocido el trabajo de años con el éxito de su propio cuarteto, Tras Coltrane, nacido en torno a la música de este saxofonista, primero con Jesús Santandreu y luego con el propio Vicent Macián como voz principal. El disco que presentamos está lleno de detalles que confirman su afinidad con el jazz más contemporáneo. Álex Cesarini, inspirado y firme, es quizá el contrabajista más solicitado de la escena valenciana actual. Con todos ellos ha compartido escenario —o viceversa— y ahora disco el pianista Albert Sanz, poseedor de una inquietud musical solamente comparable con su talento, que ha colaborado con algunas de las principales figuras del jazz internacional de los últimos años y ha grabado a su nombre varios compactos que son obras maestras. Sanz es un acompañante que en todo momento parece adivinar lo que va a suceder a su alrededor, y facilita el camino con ideas maravillosas.
Bam refleja bien los intereses y la personalidad musical de Vicent Macián. Recuerdo que desde que le escuché por primera vez quedé impresionado por el empuje y la fuerza de su fraseo, que desde entonces no ha hecho más que crecer, y también por su timbre, más oscuro y redondo que el de otros saxofonistas tenores. Macián tiene además un dominio tan alto de su instrumento que toca con una engañosa facilidad. Todas estas cualidades se aprecian perfectamente en el primer corte del disco, ese «Bam» cuyo título es una onomatopeya que se refiere a la brevedad y la contundencia de la composición. Hace tiempo que no escuchaba un tema de apertura tan seductor. «Bam» incluye solos de Vicent y de Albert, y al final cuatros del otro Vicente, el batería Espí.
«Mon petit croissant» es un tema ternario, inspirado en los carruseles parisinos y dedicado a la esposa del saxofonista. Tiene un aliento típicamente coltraniano, sugerido ya por Albert Sanz en su breve introducción a la manera de McCoy Tyner. Pero no es un tres por cuatro extático y musculoso en el estilo de «My favorite things», sino un vals que mantiene siempre un tono amable, incluso cuando los solistas se toman algunas libertades armónicas. Tras las intervenciones de saxofón y piano escuchamos un breve solo del contrabajista. El contrabajo vuelve a tener protagonismo, de algún modo, en «Entonces ya», pues es el instrumento que lo abre, con una línea escrita en 5/4 por el propio Macián. Resulta muy seductora la combinación entre el aire abstracto y esquinado del tema y el intenso groove impuesto por Espí, que Albert Sanz reconduce en su solo hacia el blues y persiste durante el solo de Macián, lleno de guiños entre saxofonista y pianista.
El mundo de la imaginación infantil fue la inspiración de «El somni de Vicent Alexandre», que Macián dedica a su hijo. Tema lento, de espacios abiertos, está atravesado por una línea de graves repetitiva que crea un clima misterioso. «26-2», de Coltrane, rompe con esa atmósfera para traernos de algún modo ecos del bebop, pues está basado en «Confirmation», de Parker, si bien los cambios remiten a «Giant steps» y es un tema de 1960, creado en el momento de mayores preocupaciones armónicas del genial saxofonista. Cincuenta años después Macián y su grupo demuestran que esta generación ya ha asimilado por completo el desafío que causó tantos quebraderos de cabeza.
«Infant eyes» (Incluido en Speak no evil, de 1964) es un tema A-B-A de 27 compases que Wayne Shorter escribió para su hija Miyako. Seguimos sin embargo bajo la influencia de Coltrane pues Macián le da un carácter rubato, muy diferente del de la versión original, que remite al estilo maduro de este saxofonista, aunque el valenciano acaba por imponer una serenidad propia. El líder del cuarteto es aquí el único solista. El homenaje a Coltrane culmina con «Countdown» (aparecido en Giant steps, de 1959), la famosa cuenta atrás inspirada en «Tune up», de Eddie Vinson, que Macián evoca con su propio lenguaje y fraseo y a un ritmo un poco más sosegado, menos dramático que el del original. También hay lugar para un breve solo de Albert Sanz.
El disco termina lanzando una mirada hacia atrás, al jazz de repertorio estándar, con una preciosa balada llevada a tempo medio, «I'll be seeing you». Macián dice haberse inspirado en la versión de Chris Cheek; la suya tiene en todo caso el sabor de los clásicos y en los solos del saxofonista y el pianista está presente ese gusto por la melodía propio de los intérpretes de otra época.

Jorge García

Repertorio:

"Bam!" (Vicent Macian)
"Mon Petit Croissant" (Vicent Macian)
"Entonces Ya" (Vicent Macián)
"El Somni de Vicent Alexandre" (Vicent Macian)
"26-2" (John Coltrane)
"Infant Eyes" (Wayne Shorter)
"Countdown" (John Coltrane)
"I'll Be Seeing You" (Kahal/Fain)

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Este nuevo proyecto empieza a elaborarse desde la experiencia de los últimos años en las diferentes formaciones en las que ha participado, concluyendo pues en esta formación con tres metales y un cuarteto en la base rítmica. El repertorio, que está compuesto por temas originales, invita a los músicos a mantener una comunicación constante, y a abrir nuevos caminos en cada una de sus actuaciones.

Desde los principios del Latín-jazz allá por los años 40 hasta hoy en día, han sido  muchas las propuestas y las maneras de entender éste género del jazz, inclinándose éste por el lado más jazzístico sin dejar de lado los ritmos afro-caribeños, que se dejan notar constantemente. Carlos Llidó Septet, es una formación solida y versátil, que hace que el repertorio elegido nos haga disfrutar de una potente banda con constantes intervenciones de los solistas y unos contundentes arreglos.


MÚSICOS

Carlos Llidó  –  Conga & Percusión
Albert Palau - Piano
Alessandro Cesarini – Contrabajo
Miquel Asensio "el Roget" – Batería
Toni Belenguer – Trombón
Paul Evans - Trompeta
Iván Albuixech – Saxo Alto

REPERTORIO

- Camino Sanjuán – (Jesús Santandreu)
- Carlitos, Mambo!! -  (Santi Navalón)
- Controlalt – (Iván Albuixech)
- Drume Negrita (Eliseo Grenet, arreglo Fco. Blanco "Latino")
- Carmen (Toni Belenguer)
- Sacromontes (Alessandro Cesarini)
- Zombie (Perico Sambeat)